En la mañana de este domingo la parroquia Ntra. Sra. del Rosario de Goya se vestía de gala. Aquel humilde párroco, nombrado por S. S. San Juan XXIII como primer Obispo de nuestra diócesis, recibía su consagración episcopal.

Hoy se cumple 60 años de aquél hito histórico...

Con memoria agradecida pasemos por el corazón a nuestro primer padre y pastor...

Oh Dios, que quisiste hacernos hijos en tu hijo Jesucristo, te damos gracias por los dones que otorgaste a nuestro Padre y Pastor Ricardo, a quien hiciste comprender y amar el misterio de la Cruz hasta exclamar: �SLejos de mi gloriarme sino en la Cruz⬝.

Lo hiciste semejante a Jesús, �anico y Eterno Sacerdote, por quien se entregó y nos pastoreó con la guía del Espíritu Santo y la protección de María.

Te rogamos que nos concedas la gracia...

(pidase la gracia deseada)

que te pedimos humildemente para tu mayor

gloria, nuestra ayuda espiritual y la glorificación de tu fiel pastor. Así sea.

Padre nuestro. Ave María. Gloria.

Con Licencia Eclesiástica.

No venerar con culto público.

Comunicar las gracias recibidas a:

Secretaría de la Iglesia Catedral San Antonio de Padua de la Concordia.

Urquiza 625. 3200 Concordia E.R. Arg.

BIOGRAFIA

Nació el 12 de octubre de 1911 en Marktredwitz, población de la Baviera alemana.

Sus padres: María Benner y Conrado Rösch que formaron una familia de nueve hijos, vislumbraron en Ricardo su vocación sacerdotal a la edad de cinco años.

La desocupación de la post-guerra lo obligó a emigrar con su familia a El Dorado Misiones, donde realizó diferentes trabajos hasta el año 1933, en que ingresó al Seminario de Villa Devoto por la Diócesis de Corrientes.

Se graduó de Licenciado en Teología en la Universidad Gregoriana de Roma y fue ordenado sacerdote en 1939.

Desde entonces ejerció su celo pastoral en la cura de almas y en la enseñanza, primero en la Diócesis de Corrientes y después en la Diócesis de Concordia.

Cuando en 1961 el Papa San Juan XXIII creó la Diócesis de Concordia y lo designó primer Obispo, se inició para él la tarea de pastoreo y construcción de esta iglesia particular que desempeñó con amor de Padre hasta su último día el 21 de agosto de 1976.

Como hijo fiel de María confió siempre en la Providencia de Dios, y ningún obstáculo lo detuvo en su tarea de dignificar al hombre, por medio de la celebración de los sacramentos y brindándole todo lo que necesitaba para alimentar su cuerpo y su inteligencia.

Desde

mons ricardo rösch

Primer obispo