El cine argentino del año 1935 - (6ª parte) �SEl caballo del pueblo⬝
�SEl Caballo del Pueblo⬝ es una película filmada en blanco y negro del año 1935 y se trata de una comedia de cierto carácter policial; de 74 minutos de duración; producida y distribuida por Lumiton y dirigida por Manuel Romero sobre su propio guion escrito en colaboración con Luis Bayón Herrera; siendo el autor de la fotografía Francisco Mujica, quien también se encargó del montaje. La escenografía fue tarea de Ricardo J. Concord, siendo la música compuesta por Alberto Soifer.
Fueron sus protagonistas Olinda Bozán (Ruperta); Pedro Quartucci (Flaco); Juan Carlos Thorry (Roberto Campos); Irma Córdoba (Esther Peña); Enrique Serrano (Viñas); Juan Mangiante (Sr. Peña); Eduardo Lema (Jockey); Vicente Forastieri; Juan Porta; Lalo Malcolm; Margarita Padín; Ángel Magaña; Pedro Maratea; Mary Parets y Nicolás Werenchuk.
Todo comienza en una fiesta en un gran salón donde hay gente ubicadas en las mesas, mientras bailan varias parejas al compás de una orquesta. En un camarín se preparan Ruperta y el Flaco para realizar su actuación una especie de sainete cómico; siendo presentados por Roberto Campos.
En una mesa se encuentra el Sr. Peña que es propietario de un stud de caballos de carrera; que está con su hija Esther y un hábil delincuente de guantes blancos, apellidado Viñas que pretende a Esther, y que lo arrastrará a turbios negocios con su convencimiento. Ruperta y el Flaco, realizan un interesante sketch con cierto ritmo de baile y comicidad que termina complicándose, cuando se les altera el ritmo y el Flaco resbala y cae sobre una mesa rompiéndola; por lo que se van rápidamente abucheados por los presentes, y algunos les arrojan elementos de adorno de las mesas. Vuelve la música orquestada y Viñas invita a bailar a Esther; pero ella no acepta, y es cuando llega Roberto Campos y con él sale a bailar enseguida dejando frustrado a Viñas. Roberto durante el baile, se pone a cantar un tango atrayendo la atención de todas las parejas que bailaban en torno a él y Esther. Posteriormente Peña imposibilitado de hacer frente a sus obligaciones promete la mano de su hija a Viña; pero Esther se enamora de Roberto que es dueño de un caballo de carrera llamado Tangazo que está preparando para competir en el Nacional que se anuncia a grandes títulos en todos los periódicos; y será el contricante de Guaraní el caballo de Peña en el que están depositadas sus ilusiones de salir airoso de su deuda monetaria -o al menos en parte- si su caballo gana; sumado a lo que luego pueda obtener con la venta de Guaraní. Peña sigue siendo víctima, de la extorsión de Viñas, quien tiene a sus órdenes a una banda de maleantes cuyo jefe tiene siete muertes en su historial delictivo; quienes para evitar inconvenientes en la carrera tratarán de matar a Tangazo y además tramposamente tratan de sobornar al jockey de Roberto; y obligarán a Esther a que le dé un excitante al caballo Tangazo para dejarlo fuera de la competición; pero ninguna de estas artimañas resulta efectiva; y además porque Esther le comenta a Roberto que la han obligado a darle el excitante a Tangazo en un terrón de azúcar, bajo amenazas de muerte hacia su padre.
El Flaco, amigo y compañero fiel de Roberto, sugiere dárselo ahora a Guaraní, molesto por las tramposas acciones de los maleantes; pero Roberto decide no hacerlo porque quiere ganar la carrera de buena fe; y le da todo el dinero que tiene al Flaco para que apueste a favor de Tangazo; y Esther le ofrece su dinero a Roberto para reforzar la apuesta. Como Roberto no acepta se lo da al Flaco para que apueste. Todo preparado los caballos en la largada detrás de una cinta que cruza la pista; y se larga la competencia -la que es seguida por una muy elogiable filmación, teniendo en cuenta la época- y Tangazo gana la carrera para algarabía del Ruperta y el Flaco, que salta y corretea, ingresando a la pista saltando y tras él corre Ruperta tratando de que se calme, y la gente que se divierte al verlos. Peña queda triste y derrumbado, luego de la pérdida del Nacional y la amenaza de Viña. Es cuando llega su hija y le confiesa su problema, ofreciéndole ella el dinero que acaba de ganar y que es una gran cifra para enfrentar el compromiso monetario. Revive la alegría en su rostro y se abraza con Esther, cuando llega Roberto a quien también abraza permitiendo el noviazgo de ambos.
El crítico Néstor (Miguel P. Tato) opinó que �Slo mejor que tiene esta película es su realización. Hay en ella acción, mucha acción⬦ rápida, variada y ágil⬝ y para Manrupe y Portela en su Diccionario del Cine Argenti no se trata de �Scine de acción y buen manejo del lenguaje cinematográfico a pesar de su argumento remanido⬝.
Por lógica que la nota cómica del filme está respaldada en la actuación de Olinda Bozán y Pedro Quartucci.
�SEl Caballo del Pueblo⬝ es la primera película de Juan Carlos Thorry, marcando su debut en el cine; quien se inició en una troupe estudiantil y se popularizó luego como miembro del famoso conjunto de jazz Santa Paula Serenaders.
Luis César Amadori lo contrató para actuar en el Teatro Maipo y en Radio El Mundo como locutor, presentador y partenaire de Niní Marshall. Un día cantando en la confitería Richmond de Florida entraron Tita Merello, Manuel Romero y Luis Bayón Herrera y Tita que había trabajado con Thorry en el cine París; lo presentó a Manuel Romero, quien luego de oírlo cantar en castellano -ya que habitualmente lo hacía en inglés- lo contrató para filmar esta película, que marcó su debut en el cine y en la que canta los tangos �SEl Zorzal⬝ y �STangazo⬝. Romero conocía muy bien el ambiente del turf y las carreras de caballos, por ser aficcionado a las mismas, lo que le permitió describir y mostrar con eficacia el hipódromo, los studs, los cuidadores, entrenadores, los jockeys y los ensayos, y las carreras. Gran parte de la filmación fue en escenarios auténticos, con ritmo rápido, continuidad y técnica aceptables.
�SEl Caballo del Pueblo⬝ se estrenó el 15 de agosto de 1935 en el cine Renacimiento de la ciudad de Buenos Aires.