Desde el inicio de la guerra murieron 104 empleados de la ONU en la Franja de Gaza
La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (Unrwa) informó además que cerca de 1,7 de los 2,3 millones de palestinos de Gaza abandonaron sus hogares desde el 7 de octubre.
Un empleado de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (Unrwa) murió en un bombardeo israelí en la Franja de Gaza, con lo que ya son 104 en el marco de la ofensiva de Israel contra el grupo islamista palestino Hamas, informó este domingo el organismo.
“El 18 de noviembre fue asesinado un colega de la Unrwa en el norte de Gaza a causa de los bombardeos (de Israel). En total, 104 colegas han muerto desde el inicio de la guerra”, dijo la Unrwa en un comunicado. “Es la cifra más alta de trabajadores de la ONU muertos en un conflicto en la historia”, agregó.
La nota denunció “múltiples incidentes” que han afectado a instalaciones de la Unrwa y a desplazados internos de Gaza durante las últimas 24 horas, y que terminaron con “muertos y heridos entre los desplazados que estaban refugiados en las instalaciones”.
El organismo detalló que cerca de 1,7 de los 2,3 millones de palestinos de Gaza abandonaron sus hogares desde el 7 de octubre, fecha del inicio de la ofensiva militar israelí tras letales ataques de Hamas en Israel. Del total, alrededor de 884.000 se encuentran en 154 instalaciones de la Unrwa en la Franja, dijo el organismo en el comunicado, informó la agencia de noticias Europa Press.
La Unrwa dijo que no pudo acceder a estos refugios para dar ayuda o protección a muchos de estos desplazados ni tiene información sobre sus necesidades o condiciones, ha alertado.
Por otra parte, confirmó que Israel la notificó de que permitirá el paso de 120.000 litros de combustible cada dos días, tras más de un mes prohibiendo toda entrega y después de autorizar un pequeño cargamento que quedó limitado al repostaje de los camiones de la Unrwa para la entrega de ayuda humanitaria.
El organismo señaló que esta nueva cantidad “será usada en dos días y sólo cubre la mitad de las necesidades críticas diarias”.
“El combustible es también clave para las redes de telecomunicaciones”, explicó, después de cuatro bloqueos de comunicaciones que han impedido el movimiento de camiones con ayuda desde el paso de la sureña ciudad gazatí de Rafah, que va a Egipto.
Israel lanzó su ofensiva en Gaza tras los ataques ejecutados el 7 de octubre por Hamas, que dejaron cerca de 1.200 muertos y unos 240 secuestrados, entre ellos una veintena de argentinos.
Las autoridades de la Franja han denunciado 12.300 muertos, entre ellos más de 5.000 niños, en bombardeos israelíes desde entonces.
El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, denunció este domingo que “los horrendos acontecimientos” de las últimas 48 horas en Gaza, incluido un bombardeo contra una escuela y la evacuación forzosa de pacientes y personal médico del Hospital Al Shifa, son acciones contrarias a “las protecciones básicas” a los civiles.
“Los horrendos acontecimientos de las últimas 48 horas en Gaza son absolutamente increíbles”, dijo Türk en un comunicado, en referencia a ataques del Ejército israelí en la Franja de Gaza en el marco de su ofensiva contra el movimiento islamista palestino Hamas.
“La matanza de tanta gente en escuelas convertidas en refugios y que cientos de personas huyan para salvar la vida del Hospital Al Shifa, en medio del continuo desplazamiento de cientos de miles de personas en el sur de Gaza, son acciones contrarias a protecciones básicas que deben ser garantizadas a los civiles, según el derecho internacional”, agregó.
Así, describió como “horribles” las imágenes tomadas tras el bombardeo ejecutado el sábado por Israel contra una escuela administrada por la ONU en Gaza, la de Al Fajura, y manifestó que “muestran claramente a un gran número de mujeres, niños y hombres gravemente heridos o muertos”.
“Al menos otras tres escuelas que acogen a desplazados palestinos han sido también atacadas durante las últimas 48 horas”, lamentó.
“Las operaciones militares israelíes han continuado en el interior y los alrededores del Hospital Al Shifa”, resaltó, antes de recordar que “colegas de la ONU visitaron el lugar y vieron de primera mano lo que han descrito como ‘una zona de muerte’”.
En este sentido, resaltó que “personal médico, pacientes y civiles han huido del hospital tras recibir órdenes por parte del Ejército de Israel”.
“Se ha visto a cientos de personas huyendo hacia el sur a pie, con un gran riesgo para su vida, salud y seguridad. ¿A dónde van? No hay lugar seguro en Gaza”, dijo, informó la agencia de noticias Europa Press.
Türk señaló que el Ejército de Israel estuvo lanzando panfletos en la sureña ciudad gazatí de Khan Yunis para pedir a los residentes que “vayan a ‘refugios reconocidos’ no identificados, incluso mientras hay bombardeos en todo Gaza”.
“Los palestinos ya desplazados, privados por las restricciones extremas a la ayuda vital, están teniendo problemas para cubrir sus necesidades básicas y se ven forzados a estar en espacios cada vez más pequeños, sobrepoblados e inseguros desde el punto de vista sanitario”, advirtió.
“Israel está obligado a proteger a los civiles allá donde estén”, remarcó Turk, que insistió en que “las normas del derecho internacional humanitario, incluidos los principios de distinción, proporcionalidad y precauciones a la hora de llevar a cabo los ataques deben ser respetados de forma estricta”.
Asimismo, advirtió que no cumplir estas normas “podría equivaler a la comisión de crímenes de guerra”.
Israel lanzó su ofensiva contra el enclave tras los ataques ejecutados el 7 de octubre por Hamas, que dejaron cerca de 1.200 muertos y unos 240 secuestrados, entre los que se incluye una veintena de argentinos. Las autoridades de la Franja denunciaron 12.300 muertos, entre ellos más de 5.000 niños, en bombardeos israelíes desde entonces.