El presidente uruguayo Lacalle Pou archivó el proyecto de reciclar el águila del Graf Spee
El mandatario desistió de convertir en paloma de la paz el águila de bronce con simbología nazi que adornaba el acorazado alemán, hundido en aguas de Uruguay en 1939, en los albores de la Segunda Guerra Mundial, porque “hay una abrumadora mayoría que no comparte esa decisión”.
El presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, anunció este domingo que desistió del proyecto de convertir en paloma de la paz el águila de bronce con simbología nazi que adornaba el acorazado alemán Graf Spee, hundido en aguas uruguayas en 1939, en los albores de la Segunda Guerra Mundial.
“Hay una abrumadora mayoría que no comparte esta decisión, y si uno quiere generar paz, lo primero que tiene que hacer es generar unión; claramente esto no lo ha generado”, explicó el mandatario en la ciudad de Melo, en el este del país, donde viajó para rendir homenaje a una figura local.
Tras ser anunciada el viernes, la iniciativa fue duramente criticada en distintos ámbitos, desde el cultural al político, incluso dentro de la propia coalición de gobierno.
“Es una idea que tuvimos hace muchísimos años, justamente de un símbolo de violencia, de guerra, transformarlo en un símbolo de paz y de unión”, había dicho el mandatario al anunciar el proyecto.
En tanto, Atchugarry expresó que la idea era “transformar un símbolo del odio, de la guerra, de la atrocidad, en un símbolo de paz”.
El sábado último, el senador uruguayo oficialista Guido Manini Ríos mostró su desacuerdo con la propuesta del presidente.
“El patrimonio cultural debe cuidarse y no puede quedar a merced de la voluntad de un jerarca; propondremos un proyecto de ley que impida la destrucción del águila del Graf Spee, y la creación de una Comisión integrada por especialistas para decidir sobre su destino”, escribió el sábado último el fundador del partido Cabildo Abierto en Twitter.
A las críticas promovidas por el general retirado se le sumaron las voces del senador del Partido Colorado Ope Pasquet y el diputado oficialista Aldo Lamorte, según el periódico uruguayo La Diaria.
La iniciativa de Lacalle Pou había desatado críticas dentro de la coalición de gobierno y en gran parte de la población, mientras el país vive una emergencia hídrica y se enfrenta a un potencial desabastecimiento de agua.
En la tarde del sábado último se creó una petición en la plataforma Change.org titulada “Conservar el águila del Graf Spee en un museo”, que en pocas horas había reunido 3.000 firmas.
“Consideramos inapropiado la transformación del águila del Graf Spee; esta debe ser conservada en un museo, la historia debe recordarse para no cometer los mismos errores”, dice la petición.
Agrega que “las nuevas generaciones quedan propensas al olvido y a la reincidencia”, y “recordar lo malo, tener presente los símbolos que lo representan es una responsabilidad enorme para con la sociedad”.
La imponente águila de bronce con las alas desplegadas y una esvástica entre sus garras, de 2,8 metros de largo por 2 de alto y 350 kilos de peso, fue recuperada en 2006 del Río de la Plata por rescatistas privados.
Luego de una exposición en un hotel de Montevideo, el mascarón de popa del buque de guerra del Tercer Reich quedó en depósito bajo custodia de la Armada uruguaya, objeto de un conflicto legal.
En 2022, la Suprema Corte de Justicia de Uruguay confirmó que la pieza era propiedad del Estado uruguayo.
El Admiral Graf Spee protagonizó, junto a los cruceros británicos Exeter y Ajax, y el neozelandés Achilles, la Batalla del Río de la Plata, uno de los primeros enfrentamientos navales de la Segunda Guerra Mundial (1939-45), que tuvo lugar frente a la costa uruguaya el 13 de diciembre de 1939.