El �SNegro⬝ Martínez cumple 40 años vendiendo El Heraldo
Corría marzo del año 1982 cuando el joven José Salvador Martínez, casi de casualidad, se hizo cargo del recorrido, como canillita, que tenía su madre; recorrido que, anteriormente, pertenecía a su otro hijo, hermano de José. Este mes, se cumplen 40 años de que �SEl Negro⬝, como se lo conoce, pertenece al grupo de canillitas de diario El Heraldo. �SMás 50 vueltas al mundo en kilómetros recorridos⬝, es el cálculo más sobresaliente de esta historia.
�SEl Negro⬝, cuenta que su hermano tenía más de 100 clientes que, cuando el recorrido pasó a manos de su madre, el mismo se fue achicando; pasó el tiempo y �Sella ya no lo quería hacer más, porque lo hacía caminando y un día me preguntó a mí, por casualidad, si yo quería agarrar los clientes que ella tenía; y a mí me agarró sin trabajo, así que le dije que sí. Yo jamás me imaginé que iba a pasar lo que pasó⬝, remarca José.
�SEl primer día que hice el recorrido, saqué unos diarios de más y empecé a vocearlos; al segundo día, un poco más, aparte de la clientela de mi mamá; y creo, que tuvo que ver mucho el carisma, o la presencia, o vaya a saber qué, pero la gente me empezó a tomar confianza y esperaba que yo llegara⬝, relata Martínez. �SSiempre en bicicleta⬝, resalta.
El Negro recordó que, al cabo de un mes, un mes y medio, �Spodía decir que podía vivir bastante bien⬝; y, �Sel hecho que aceleró mi historia, fue la Guerra de Malvinas, en el mes de abril, fue como echar un fosforo a la nafta, la cantidad de clientes que me compraba el diario, fue impresionante⬝. �SPasaron cinco meses de esto y tuve que tomar a un pibe para que me ayude⬝, explicó.
�SEn un momento, tuve el ingenio, creo fue el motivo del crecimiento, que a esos pibes que tenía le pagaba, aparte, por cada cliente que me traían y fue así que tuve que tomar a otro más⬝, continúa el relato del �SNegro⬝ quien debió dejar otros trabajos que tenía porque no podía con el �Strajín⬝. Todo esto, llevó a que Martínez llegue a tener la distribuidora autónoma más grande que tuvo diario El Heraldo. Además, cuenta que �Sun octubre; puede que haya sido para la vuelta a la Democracia �no lo recuerda-, por la que el diario hizo una edición especial, a la tardecita, llegue a vender 13.500 ejemplares en el mes.
�STenía una muy buena estructura, pero llegó un día que las cosas empezaron a caer, como todo, va subiendo, va subiendo y un día empezó a caer, a caer, a caer y el tiempo hizo que me quedara solo con un grupito de clientes, un grupo muy minúsculo de clientes y me extendí hasta las zonas de colonias, pero ya solo⬝, recuerda Martínez. �SOsvaldo Magnasco, Colonia Roca, la entrada de San Bonifacio, LA entrada de La Criolla, todo el tiro de la ruta 015, el acceso Salto Grande, entraba al Cortijo, Colonia Ayuí⬝, detalló. �SHoy, me pongo a pensar lo que hacía en esa época, para llegar a cada cliente, digo ��yo estaba loco�"⬝, cuenta sonriente.
Por último, Martínez se refirió al cambio que se viene dando con la tecnología y remarcó que �Syo debo ser uno de los pocos canillitas que están quedando y sigo firme porque tengo una clientela fiel porque a pesar de que se han muerto los más viejitos, no siguen la tradición de leer el impreso, pero todavía tengo clientes como para pelearla y seguir; el día que tenga que cambiar de rumbo, veré, pero nadie me saca a mí la experiencia que yo adquirí durante todos estos años en todos los sentidos⬝.