Hallaron un barco hundido hace más de 100 años
El barco fue hallado en costa de la localidad correntina de Ita Ibaté. Era un vapor a rueda y muy utilizados en el Paraná a fines del 1800. Prefectura retiró el ancla y otros elementos con fines de preservación.
La bajante histórica del nivel de agua del río Paraná permitió que los restos de un barco de vapor a ruedas que naufragó hacia comienzos del siglo XX, hace más de cien años, fuera hallado frente a la costa de la localidad correntina de Ita Ibaté.
�SSe trata de un barco de unos 20 metros de eslora que prestaba servicios a la estancia de la familia Toledo Alvarez Nuñez, era un vapor a rueda, como los que surcaban el río Mississippi y que eran muy utilizados en el Paraná a fines del 1800⬝, comentó a LaNación Raúl Soperez, propietario de unas cabañas que están situadas justo frente al sitio donde descansan los restos del barco.
Cerca de la superficie
Soperez y otros lugareños sabían que el barco se encontraba por esa zona del río, en algún lugar indefinido, pero recién ahora pudieron visualizarlo con la bajante histórica del Paraná, que permite verlo a simple vista si uno se acerca en lancha, ya que una parte de la estructura se encuentra a apenas 20 centímetros de la superficie. Inmediatamente pusieron boyas y señalamiento para evitar que otras embarcaciones pudieran chocar, dañar los restos del barco o sus propias lanchas. �SLas hélices de cualquier lancha podrían tocar el barco⬝, comentó. Además, retiraron el ancla y otros elementos con fines de preservación.
Transporte de mercancías
La seccional Alto Paraná de la Prefectura, con sede en Posadas, envió buzos y realizó una filmación con un dron, donde se puede apreciar desde lo alto la silueta de este barco que se dedicaba al traslado de mercadería. �SAcá había saladero, y se transportaban cueros, maíz y mandioca⬝, explica Soperez. Además, la Prefectura lo incluyó dentro de la carta náutica para esa zona del río. Soperez está bastante empapado de la historia de la estancia de la familia Toledo Alvarez Nuñez, que luego se unió con la familia Gallino ya que sus cabañas se erigen donde antes estaba el casco de la estancia.
Buscan preservarlo
�SPor relatos de los lugareños que se fueron transmitiendo de boca en boca, se calcula que este barco estaba cargado cuando lo agarró una tormenta que lo hizo naufragar, hacia fines del 1800 o principios del 1900, tiene más de 100 años bajo el agua⬝, explicó. Este santafesino de 56 años, que vivió más de la mitad de su vida frente a la ribera correntina, contó que acordó con el intendente de Ita Ibaté, Walter Almirón, avanzar rápido con algún tipo de declaración u ordenanza que preserve los restos del barco con fines históricos, culturales y turísticos.
Muy comunes en la segunda mitad del XIX
Los barcos de vapor a rueda se hicieron populares en el río Paraná y Uruguay hacia la segunda mitad del siglo XIX, según el sitio Historia y Arqueología Marítima. Hacia finales de ese siglo y comienzos del XX, llegaron los barcos a hélice que gradualmente los fueron desplazando, hasta condenarlos a la desaparición. El río Paraná estaba lleno de pequeños barcos de vapor a rueda que conectaban el puerto de Buenos Aires, donde llegaban pasajeros de ultramar, con los puertos correntinos. Hay que tener en cuenta que por entonces el transporte por vía terrestre era mucho más largo y engorroso y todavía faltaban algunas décadas para la aparición de los aviones y los automóviles. Había puertos o muelles a lo largo de todo el río Paraná hasta llegar a Puerto Iguazú. En 1869 -casi al final de la Guerra de la Triple Alianza- apareció la primera flota fluvial, que perteneció a Guillermo Martí Riera, que tenía 14 barcos. Dos de ellos, el Espigador y el Esmeralda cumplían un servicio mensual desde Buenos Aires al puerto de Corrientes, señala el sitio especializado en historia de la navegación marítima y fluvial.