Reflexionemos sobre nuestro ambiente y la fe en Dios
Vivimos en un planeta que es nuestra casa sin embargo no tenemos cuidado de nuestro hogar, la tratamos como si fuera la casa de otro; quizás por egoísmo. Sin pensar que los problemas ecológicos los van a padecer nuestras mismas generaciones las que seguirán viviendo, como nuestros hijos, nietos, bisnietos, tataranietos, etc.
Algunos dicen que el problema está en la biblia porque en el Génesis 1: Dios le dice al hombre que tome la tierra, se la apropie y la domine. Siendo que el texto y el contexto no es este. Desobedecemos a Dios, porque él puso al hombre en el Edén, lugar tan fructífero para que lo cuide y lo trabaje, no es lo mismo decir que se siente bajo la sombra de un árbol y espere a que el fruto le caiga en su boca, el ideal es que el hombre será bendecido cuando obtenga el fruto producto de su trabajo.
Trabajar la tierra, cuidándola, eso significa obedecer lo que nos fue prestado mientras habitemos en ella; o sea que deberíamos hacer uso y no abuso de ella; como por ejemplo realizar una labor en la tierra durante seis años y al séptimo año dejar descansar a esta.
En Argentina el desmonte en este momento está matando el suelo. Se desmonta para sembrar, el grano que sea más productivo por ejemplo la soja y a la tierra se la somete siembra tras siembra, cosecha tras cosecha, sin descanso; se sabe por estudios realizados, que la química del suelo es alterado por cada siembra, por Ej. si se siembra maíz durante tres años seguidos al cuarto habría que plantar alfalfa o festuca para que la tierra adquiera el nitrógeno que perdió por la siembra del maíz. Hoy en día se hace hasta dos cosechas, una detrás de la otra seguidas de soja sobre la misma tierra, y a esa tierra empobrecida la fortalecen con productos químicos, dejando de ser una tierra noble para ser una tierra manufacturada o producida y eso a la larga trae problemas sobre la misma humanidad
La especie humana destruye el planeta por la ambición de ganar dinero. Se talan cada día 2.000.000 de hectáreas de árboles en el Amazonas, siendo este lugar la mayor reserva ecológica y de aire que tenemos en el planeta. 200.000 toneladas de basuras se arrojan en el mar, desastres nucleares como el de Chernóbil producido por la negligencia del hombre, y todavía se están pagando las consecuencias.
Lo mismo sucede con los animales, recordemos el mal de la vaca loca, por obsesionarnos por la alimentación científicas a base de huesos para los vacunos, se produjo ese daño en las vacas.
Así también podemos usar la fuerza de sangre pero evitando el sufrimiento. Si cualquier persona ve a un animal doblegarse en el peso que soporta aunque su dueño sea nuestro enemigo la obligación es correr a quitarle el peso para que el animal no sufra. No es posible consentir el sufrimiento de todo aquello que tenga vida.
La depredación es perjudicial para el planeta; si se encuentra un nido de aves no se debe ser cruel y tomar la madre junto con sus huevos, se debe dejar la madre para que siga engendrando y apropiarse de los huevos con el fin de alimentarse, si no es para ese fin hay que dejarlos crecer, de esta manera no se extingue la especie.
El mensaje divino es respeto a toda criatura viviente, respeto a la naturaleza.
Debemos cuidar la obra de Dios. Vivimos de prestado, no somos dueños de nada. Cuando nacemos llegamos con los puños cerrados como indicando que todo el mundo nos pertenece, pero cuando partimos nos vamos con nuestras palmas abiertas de este mundo, no nos llevamos nada, solo quedan las buenas o malas obras que hemos hecho.
Si estamos aquí de paso, disfrutando lo que otros plantaron o construyeron con esfuerzo y dedicación, ¿qué derecho tenemos de destruirlo?
Poseemos un egoísmo humano, y, el facilismo, el utilitarismo a ultranza, que es nuestro estilo de vida del siglo XX y XXl como consecuencia del desarrollo tecnológico �Súsalo y descártalo⬝ y ¿qué hacemos, con lo que descartamos? llenamos el mundo con basura pero no importa total lo que importa es el hoy aquí y ahora sin meditar las consecuencias.
El calentamiento global lleva a que se reúnan en conferencias internacionales y proponen esto y aquello y todos dicen si, si, si y cuando están en cada uno de su país es no, no, no porque no les conviene hacer lo que sería correcto debido a que el producto bruto desciende en su obtención y las ganancias también.
Por el calentamiento global en el polo norte que no tiene tierra, los deshielos son cada vez más, y suben las mareas y esto hace desaparecer especies de animales importantes que hacen al equilibrio ecológico, y a esto se le suma las depredaciones del hombre.
Estamos terminando con nuestro planeta.
Estamos descuidando el primer mandato que nos dejó Dios, �SCuidar la Tierra⬝
Toda la creación de Dios es perfecta y el 1er mandamiento que deja Dios es �SCuidarla⬝.
Hay un aforismo que dice: �SDios perdona siempre, el hombre perdona de vez en cuando, la naturaleza no perdona nunca⬝. Y ella se la cobra.
Olga Isabel Nuñez