Temporal provoca inundaciones y pérdidas
En el corazón del Barrio Lavarden, las carencias en el mantenimiento de las zanjas de calles Diamante y La Paz han desencadenado una serie de inundaciones que han sumido a numerosas familias en una crisis. La calle Padres Capuchinos se ha vuelto prácticamente intransitable, afectando la movilidad y la vida cotidiana de quienes residen en la zona.
Los vecinos de la calle Vito Moreno, específicamente entre Federación y Nogoyá, han experimentado pérdidas devastadoras. Muchas de estas familias se han visto obligadas a enfrentar la pérdida total de sus pertenencias debido a las inundaciones recurrentes, y a pesar de sus reiterados pedidos de ayuda y soluciones, sus reclamos parecen caer en oídos sordos. La situación se ha vuelto insostenible para quienes llaman hogar a esta área afectada. Las familias, que claman por una acción municipal inmediata, se encuentran desesperadas y sin respuestas concretas. La falta de atención a las necesidades básicas de mantenimiento ha dejado a estas comunidades vulnerables a los embates de las inclemencias climáticas. La calle Padres Capuchinos, una vía vital en el Barrio Lavarden, se ha convertido en una suerte de río urbano, haciendo que la movilidad sea peligrosa y dificultosa para los residentes y comerciantes locales. La intransitabilidad de esta vía ha afectado no solo a quienes residen allí, sino también a la actividad comercial y al tránsito general en la zona. Más allá de las pérdidas materiales, la falta de respuesta a los reclamos vecinales también afecta a la producción local. y trabajadores dedicados a la producción de verduras en la zona se ven forzados a lidiar con las consecuencias devastadoras de las inundaciones periódicas, perdiendo cosechas completas y su sustento económico. Los habitantes de la calle Vito Moreno, entre Federación y Nogoyá, claman por una solución inmediata a esta problemática que afecta no solo sus hogares, sino también su capacidad para sostenerse económicamente. Exigen a las autoridades locales que atiendan sus necesidades, implementen medidas de prevención y lleven a cabo un mantenimiento adecuado de las zanjas para evitar tragedias futuras. El Barrio Lavarden, una comunidad trabajadora que ha contribuido al desarrollo de la ciudad, espera con ansias una respuesta efectiva por parte de las autoridades municipales, quienes tienen la responsabilidad de garantizar la seguridad y el bienestar de todos sus habitantes.