Aunque los mandatarios provinciales no cierran filas sobre la postura del Presidente, coinciden en que las estrategias electorales deben adaptarse a las particularidades de cada distrito. Esta visión contrasta con el mensaje unificador del líder libertario en su entrevista con Forbes.

Entre los gobernadores del Pro, destacan los “puros” Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Ignacio Torres (Chubut) y Jorge Macri (Ciudad de Buenos Aires), así como los “aliados” Marcelo Orrego (San Juan) y Claudio Poggi (San Luis). Hasta ahora, han buscado equilibrar su identidad partidaria con los vínculos con la administración nacional.

En un acto con militantes, Jorge Macri reafirmó la vigencia del Pro y descartó que la Ciudad de Buenos Aires sea una moneda de cambio en un eventual acuerdo político con Milei.

“Algunos dicen que el Pro fue. No fuimos. Estamos vivos, con ganas de dar la batalla. Queremos que al Presidente le vaya bien, porque si al país le va bien, esta Ciudad vuela. Vamos a ayudar, pero también a poner límites”.

Macri también analiza separar las elecciones porteñas de las nacionales para proteger el bastión del Pro en el distrito.
Por su parte, Rogelio Frigerio se mostró más conciliador en declaraciones a Radio Rivadavia, al sugerir la posibilidad de compartir lista con La Libertad Avanza: “Me tienta que podamos ir juntos los que pensamos más o menos lo mismo, pero hay que dejar de lado las cuestiones personales”. Sin embargo, aclaró: “No me pasé a La Libertad Avanza. Soy de Juntos por Entre Ríos, un espacio que crece y se consolida”.

Frigerio también reconoció las tensiones con los libertarios, destacando el rol decisivo del Pro en garantizar la gobernabilidad de Milei en sus inicios. Además, mantiene un diálogo constante con Mauricio Macri, con quien coincidió en respaldar un pedido conjunto de los gobernadores de JxC para avanzar en el presupuesto 2025.
La disputa entre convergencia y autonomía marca un nuevo capítulo en la relación entre el Pro y La Libertad Avanza, mientras los líderes provinciales buscan consolidar su identidad política en un escenario nacional cambiante.