El maíz es el gran protagonista de Congreso Internacional
Aliado a la sustentabilidad de la tierra, el maíz será tema central de debate en el segundo Congreso Internacional a desarrollarse 12 y 13 de septiembre en Paraná. La entrada es libre y gratuita, con cupos limitados.
Fomentar la producción de un cereal ampliamente versátil, capaz de adaptarse a distintas utilidades, y colaborar en la generación de valor agregado que diversifique la producción, aportando mayor mano de obra y rentabilidad, son algunas de las variables que testimonian la importancia de este gran evento.
El segundo Congreso Internacional del Maíz, tendrá lugar en el Centro Provincial de Convenciones (CPC), el acontecimiento de relevancia internacional forma parte de las actividades del calendario del bloque que conforman Entre Ríos, Córdoba y Santa Fe y es ya una política pública establecida por la Junta de Gobernadores de la Región Centro, con el fin de continuar con el fortalecimiento de una de las cadenas productivas más importantes del país. Las jornadas cuentan también con el apoyo del Consejo Federal de Inversiones, y son organizadas por Maizar y La Pastelera Producciones, quienes ya confirmaron la participación de más de cien oradores nacionales e internacionales, especialistas y figuras destacadas del deporte que se vinculan con la actividad agropecuaria.
Inscripción previa
Para una mayor organización y porque el espacio es limitado, el Congreso requiere inscripción previa. La misma puede realizarse a través del siguiente enlace: https://congresointernacionaldemaiz.com.ar/ Además, en el sitio oficial los participantes podrán acceder al programa oficial del evento día por día y a las bases y condiciones para participar del sorteo “Ganá un viaje al FarmProgress Show 2024” que consiste en una entrada para una de las jornadas del FarmProgress Show, edición 2024 y los gastos de alojamiento que sean necesarios para dicho viaje, durante tres días.
Más sobre el Maíz
En relación a los beneficio que proporciona la producción del maíz, el secretario de Agricultura y Ganadería de la provincia, Lucio Amavet, indicó que “el maíz genera en comparación con otros cultivos, innumerables beneficios desde el punto de vista de la sustentabilidad, la generación de mano de obra, mayor grado de inversión y por ende mayor desarrollo económico en pueblos y ciudades del país”. Por lo tanto, acompañar y generar las condiciones para que el sector privado pueda producir más toneladas del cereal ha sido un trabajo permanente de este gobierno provincial.
Un cereal sustentable
El principal uso del maíz en Entre Ríos tiene que ver con la transformación de la proteína vegetal en animal, especialmente en la cadena avícola. Una investigación que toma como estudios de casos, nueve plantas de empresas entrerrianas, concluyó que la industria avícola argentina se encuentra entre las más sustentables del mundo.
En el marco de un trabajo conjunto del Centro de Empresas Procesadoras Avícolas (CEPA) y el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), once plantas que faenan pollos realizaron un trabajo sobre la huella de carbono y de agua de la carne aviar argentina.
De estas once firmas, nueve son empresas entrerrianas que formaron parte de los estudios de casos para dicha investigación: Granja Tres Arroyos, Las Camelias, Bonnin, Calisa, Domvil, FadelS.A., Noelma, Sede América y Soychú, en la cual se estimó una faena total anual -entre las once plantas, incluyendo a Pollolín y Supermercado Toledo- de 346 millones de pollos.
Los resultados indican que la huella de carbono es de 1,50 kg de CO2 eq/kg de carne de pollo.
El impacto se distribuye en las etapas del frigorífico (25,3%); granjas de engorde (29,3%); plantas de alimentos balanceados/piensos (41,9%); granjas de postura (1,0%); granjas de recría (0,5%) e incubadora (1,9%).
Dentro de la huella detectada, el transporte es uno de los grandes aportantes a la contaminación. Esto se debe a que la industria del transporte, es una de las principales preocupaciones a nivel mundial ya quela quema de combustibles fósiles genera emisiones de dióxido de carbono (CO2) y otros gases de efecto invernadero. Igualmente, los resultados del estudio se encuentran dentro de los rangos internacionales y en muchos casos por debajo de ellos. El desafío por delante es continuar abordando mejoras que hagan a aumentar las hectáreas cultivadas para disminuir los kilómetros de transporte que demandan salir fuera de la provincia para abastecer al consumo.
Algunos datos, desafíos y oportunidades para el sector
Las exportaciones de maíz generaron el año pasado una importante suma de divisas para la provincia: fueron un total de 227.247 toneladas exportadas que significaron 384.000 dólares.
No obstante esto, existe un faltante de aproximadamente 350.000 toneladas de maíz entrerriano para alimentar sólo a la producción avícola.
Además, durante el 2022 las cadenas bovina y porcina demandaron casi 568.000 toneladas de maíz entre tambos, feedlot, cría de terneros y porcinos.
Con estas cifras, Entre Ríos es una de las únicas provincias que procesa más maíz del que se exporta en su forma bruta y además tiene que comprarle a otras provincias, para poder abastecer otras cadenas productivas.
Es por eso que desde el gobierno provincial se sigue trabajando en dos objetivos centrales. “El primero es seguir ampliando el área sembrada de maíz -teniendo en cuenta que es una provincia que necesita sembrar aproximadamente entre 100 y 150.000 hectáreas más de maíz para poder autoabastecerse-; esto es, generar el maíz que demandan las distintas cadenas que consumen y que transforman la proteína vegetal en proteína animal”, señaló el secretario de Agricultura y Ganadería, Lucio Amavet.
“Y por otro lado, todo ese conocimiento que se generará en este congreso internacional, contribuirá a ver de qué manera acortamos la brecha de rendimientos. Ahí también está puesta la atención, el esfuerzo y el trabajo articulado entre el sector público y privado para ir aumentando los quintales de rendimiento”, indicó.
De esta manera, el Congreso Internacional del Maíz, significará una instancia crucial para continuar pensando en generar políticas públicas que ayuden a incrementar la superficie sembrada de un cultivo que tanto aporte trae al bienestar económico y social de nuestro territorio.