Fueron 38
En la 1ª peregrinación mariana a pie hacia Federación, fueron 38 feligreses, llevados por el padre Ismael Dri, párroco de Pompeya hace 44 años. La fe fue creciendo, dijo el padre Petelín, y este año fue el doble de peregrinos que el año pasado, llegando aproximadamente a 10.000 peregrinos y eso lo llenaba de gozo.
Llegaron buscando el amparo de María Inmaculada de la Concordia para agradecer y pedir favores y protección para sus familias.
Fueron llegando en grupos muy organizados, de distintas parroquias con sus párrocos, cantando y rezando himnos de amor a la madre de Dios, para que los guíe y los llene de fe.
El obispo monseñor Luis Collazuol contó que esta zona de Concordia tuvo la presencia de la enseñanza cristiana de Jesuitas. Luego fue en 1777 en la estancia de Villa Concepción de Mandisoví, que llegó esta Virgencita, y comenzó a acompañar bajo su manto a todos los pobladores en las buenas y en las malas que llegaran a ella de Mandisoví, pasó a la vieja Federación y luego llegó a la nueva Federación donde se encuentra en la parroquia María Inmaculada de la Concordia donde se la venera. Allí todos los años se realiza la peregrinación a pie. Desde la ruta 14, los últimos tramos de 38 kilómetros a Federación y que ya es tradicional.
Es una peregrinación que llega a dicha Virgen patrona de la Diócesis para reflexionar y compartir, con un grupo mariano, en una experiencia realmente conmovedora y llena de Amor y Paz tan necesarios en estos tiempos por los que estamos pasando, en el mundo entero y que deje a dichos peregrinos, llenos de profundidad espiritual, y de grandeza interior, muy beneficiosa como seres humanos, para seguir creciendo en la fe, por el buen camino de lo personal y en comunidad de peregrinos.
Teresita Miñones de García