El enfoque poético de Manuel Troncoso en la vida urbana
Se trata del poemario “Multifruta”, del actual diputado y futuro Ministro de Gobierno y Trabajo de la gestión de Rogelio Frigerio. La actividad se realizó en el Salón de la Uader, cuya editorial editó la publicación. “Uno no elige ser poeta, la poesía lo elige a uno”, expresó el autor.
Por primera vez, la Editorial de la Universidad Autónoma de Entre Ríos (Uader) presenta un libro de poesías. Inaugura este rumbo, dentro de la colección Travesías del catálogo, con el poemario “Multifruta”, de Manuel Troncoso.
La presentación de la obra estuvo a cargo de la secretaria Académica, Alfonsina Kohan, en un encuentro con familiares, amigos y el público lector, que tuvo lugar el miércoles 6 de diciembre, en el Auditorio “Amanda Mayor” del Rectorado.
Abrió el encuentro el rector Luciano Filipuzzi, que celebró que la obra de Troncoso integre el catálogo de la Editorial. Valoró que el autor, que ha publicado otros tres poemarios y una novela, pudiera darse un lugar para la ceremonia en una agenda política compleja en virtud del rol de Troncoso como diputado provincial saliente, que asume el 11 de diciembre una nueva función como ministro de Gobierno y Trabajo.
Kohan, en tanto, repasó el trabajo que viene desarrollando en los últimos tres años la Editorial Uader. Valoró el equipo que la lleva adelante y que ha asumido el desafío de “repensar el catálogo y apostar a hacer libros que muestren el acervo cultural de nuestra provincia”.
En esta búsqueda se enmarca la decisión de editar el poemario de Troncoso, el primero que se incluye en la colección Travesía. Tras marcar las huellas de la poesía de Ricardo Zelarayán en la obra de Troncoso, Kohan hizo saber que “Multifruta” incluye “52 poemas variopintos, una gran heterogeneidad donde van a encontrar de todo: desde un animal que causa un accidente en la ruta, hasta metáforas sexuales apasionantes, mosquitos y mariposas asociadas con determinadas partes y movimientos. Encontrarán un yo poético que no se siente cómodo ni siquiera estando desnudo en su propia casa, encontrarán la vida y la muerte, transitando cada uno de los versos, y por supuesto el amor y el desamor”.
"No es poesía tradicional. Esta poesía rompe, es más urbana que tradicional, es más universal que local, pero al mismo tiempo es muy nuestra, con lugares, pueblos, animales, plantas que son nuestras”, resumió Kohan que insistió con la idea: “Esta poesía rompe, rompe en serio. Me gusta que la literatura rompa estereotipos y eso hace este autor con su literatura que es entrerriana. Lean poesía entrerriana. Tenemos una literatura que vale la pena”.
Al tomar la palabra, el autor transmitió su convicción de que “uno no elige ser poeta. La poesía lo elige a uno”. “No hay un hecho inteligible, a diferencia de otros géneros. Hay una cuestión, algo que arde, una llama interna y la única manera en que se apaga es escribir. Lo malo es que de esa manera luego se enciende más la llama y más tenés que escribir”, expresó.
Confió en sus rutinas, su producción de poemas, el modo en que los pone en común con sus allegados en el marco de “una vorágine de caos laboral, muy frenética, muy linda”. Contó su formación en la escritura con Daniel Durand y puso en valor su estudio de la poesía entrerriana: “Soy hijo de Durand y nieto de Zelarayán”, expresó el autor.