Cobro por los envases de «take away» y adiós en 2021 al plástico de un uso
Transición Ecológica presentará previsiblemente la nueva normativa en el Consejo de Ministros, que incluye también la obligación para bares y restaurantes de ofrecer agua del grifo gratis.
La limitación a los plásticos de un solo uso, esos que acaban sistemáticamente en el mar, ocasionando daños graves a la vida marina, sigue adelante en España. El primer anteproyecto de ley que recoge el adiós a las pajitas, a los bastoncillos o a la cubertería desechable pasará previsiblemente hoy martes por el Consejo de Ministros.
Pero el texto va más allá, e incluye también la obligación de ofrecer agua gratis en bares y restaurantes, el cobro por los envases plásticos de comida para llevar en 2023 o sanciones por introducir residuos en España o abandonarlos en el campo que pueden llegar a los dos millones de euros si son peligrosos.
Transición Ecológica lanza así el paquete de economía circular, que incluye la futura Ley de Residuos y Suelos Contaminados, un real decreto sobre traslados de residuos y la estrategia de economía circular, en donde se fija como objetivo que España reduzca en una década un 30% el consumo nacional de materiales, mejore un 10% la eficiencia en el uso del agua y recorte un 15% la generación de residuos respecto a 2010.
En lo que se refiere al anteproyecto de la ley de residuos, que transpone los objetivos marcados por la Unión Europea, hoy comenzaría el trámite de información pública.
El texto recoge que a partir del 3 de julio de 2021 quedarían prohibidos en España los bastoncillos de algodón; la cubertería y platos de plástico, las pajitas o los palitos para sujetar globos.
También los recipientes y vasos para alimentos y bebidas hechos de poliestireno expandido, incluidos sus tapas y tapones. Y se prohibiría el plástico oxodegradable y el uso de cosméticos y detergentes que contengan microplásticos añadidos.
Las botellas de plástico tienen también medidas propias. Se regulan objetivos de recogida separada y en 2025 se deben recoger separadamente el 77% en peso respecto al introducido en el mercado, y en 2029 llegar al 90%.
Además, como estrategia para frenar el consumo de botellas, será obligatorio que bares y restaurantes ofrezcan siempre a los clientes agua gratis no envasada.
Cobro por envases
Otros muchos productos plásticos también se verán afectados. Es el caso de los recipientes de comida para llevar y los vasos y tapas, que desde el 1 de enero de 2023 deberán cobrarse al consumidor.
Además, en 2026 debería haber caído su uso a la mitad con respecto a 2022; y en 2030, esa reducción debe ser del 70%. Deberán ser las propias empresas las que deban fomentar otras alternativas, ya sea a través de otros materiales o el uso de productos reutilizables.
Además, también se establecen nuevos objetivos de reciclaje para los residuos municipales.
En 2025, el 55% deberán haberse tratado para reutilizarse y reciclarse; en 2030, el 60%, y en 2035, el 65%.
El último año del que se tienen datos muestran que en España se reciclaron el 46,1% de los residuos municipales. Por otra parte, se prohibirá a partir de 2021 la destrucción de excedentes textiles, juguetes, aparatos eléctricos.