Expertos advierten que la Argentina podría perder el 40 % de sus playas
El informe fue publicado por Nature Climate Change. Se estima que unos 4.000 kilómetros de costa podrían desaparecer en los próximos 80 años.
Un informe internacional advirtió que para el año 2100, Argentina podría perder hasta el 40% de sus playas, como consecuencia del cambio climático. El impacto negativo de la contaminación afectaría de forma severa a varios lugares que son claves para el turismo, especialmente en vacaciones de verano.
El informe, publicado en la revista científica �SNature Climate Change⬝, reveló cuáles son los efectos del cambio climático. Llegó a varias conclusiones: una de ellas, estima que para el año 2100, varios países podrían perder hasta el 40% de sus playas.
En ese grupo de naciones que corren peligro de padecer una merma en sus costas se encuentra la Argentina, ubicada dentro del top 10 de los países más afectados. También advirtió que en los próximos 30 años, las playas de nuestro país perderían 100 metros de arena.
�SSe van a perder 4.000 kilómetros de costa en 78 años⬝, estimó el biólogo Fabricio Ballarini, quien profundizó sobre los detalles del informe hecho por la publicación científica Nature Climate Change.
En la Costa Atlántica bonaerense, una de las zonas más afectadas del país, se pierden hasta dos metros de playa por año. No obstante, los expertos en materia climática también advierten en el informe que el impacto puede golpear de lleno a distintos puntos de la provincia de Entre Ríos, por donde transcurren los ríos Ibicuy y el Paraná.
�SLa playa funciona como una especie de barrera de contención de tormentas y de la embestida del mar, mientras más extenso el terreno con arena menor será el impacto⬝, Ballarini consideró sobre los efectos de este fenómeno impulsado por el cambio climático.
El trabajo publicado por Nature Climate Change, reunió décadas de datos obtenidos por expertos de Estados Unidos y China. Las conclusiones han permitido a los científicos comprobar, por primera vez, que la Corriente Circumpolar Antártica (CCA) está sufriendo esa aceleración.
Para el estudio se usaron mediciones por satélite de la altura de la superficie del mar y datos recogidos por la red mundial de boyas oceánicas Argo (en pleno funcionamiento desde 2007), para detectar una tendencia en la velocidad de la capa superior del océano Antártico que había permanecido oculta para los científicos hasta ahora.