La OMS considera ahora «peligrosos» los niveles de contaminación del aire que antes eran «seguros»
Endurece sus criterios por primera vez desde 2005 y pide a los grandes contaminadores globales «reducir el sufrimiento y salvar vidas».
A partir de ahora, los criterios que determinan la calidad del aire serán más estrictos para agentes como el ozono, el dióxido de nitrógeno, el dióxido de azufre y el monóxido de carbono, causantes de la muerte prematura de siete millones de personas anuales, anunció este miércoles, en Ginebra, la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Por primera vez, desde 2005, la agencia sanitaria de la ONU actualiza los criterios de referencia para determinar la calidad del aire con el fin de salvar vidas humanas y proteger el medio ambiente ya que, durante los últimos años, la polución ha afectado de forma negativa a la salud humana, sobre todo en los países más pobres.
Aunque solo son recomendaciones, las nuevas normas definen un marco más restrictivo y permiten que las autoridades nacionales puedan mejorar la calidad del aire y evitar muertes prematuras, diabetes o enfermedades neurodegenerativas. Un 90% de la población mundial podría estar afectada y solo en Europa unas cincuenta mil vidas humanas podrían salvarse anualmente.
Los umbrales de seguridad se han limitado para seis tipos de contaminantes: las partículas de suspensión de menos de 2,5 micras de diámetro (PM2,5), las partículas de menos de 10 micras (PM10), el ozono (O3), el dióxido de nitrógeno (NO2), el dióxido de azufre (SO2) y el monóxido de carbono (CO2).
El umbral de seguridad que se ha reducido más ha sido el del dióxido de nitrógeno. Hasta ahora los científicos consideraban que una exposición anual de 40 microgramos por m3 no perjudicaba la salud humana. Sin embargo, las nuevas recomendaciones lo reducen hasta 10 microgramos por m3.
Las recomendaciones de la OMS también apuntan al dióxido de nitrógeno (NO2), con frecuencia relacionado con los motores de vehículos o a las emanaciones de las centrales térmicas. Alrededor de 18 países de la Unión Europea (UE) superarían los límites anuales impuestos para el NO2 y unos 16 los de las partículas finas.
Según este organismo, los límites de contaminación se sobrepasan con frecuencia en la UE, a pesar de que los confinamientos decretados a causa de la pandemia de Covid-19, a lo largo de 2020, limitaron considerablemente la actividad industrial y humana en la zona y tuvieron resultados positivos sobre la calidad del aire.
Un total de 19 países de la UE superan los límites anuales impuestos por la OMS para el ozono. Los que registran las concentraciones más importantes, sobre todo en primavera y verano, son los países situados al sur del continente. Cabe destacar que, en esas estaciones las condiciones meteorológicas favorecen la formación de este gas de efecto invernadero.
Respecto a las partículas finas PM2,5, que penetran en los pulmones causando enfermedades cardiovasculares y respiratorias, la OMS ha limitado los umbrales de seguridad reduciendo a la mitad la exposición máxima recomendada anual: se pasa de un valor de 10 microgramos por metro cúbico a cinco.
En el caso de las partículas más grandes, las PM10, el límite anual pasa de 20 microgramos por metro cúbico a 15.
En España, los límites de contaminación fijados por las autoridades respecto al dióxido de nítrogeno se han regido por la normativa dictada por la OMS. Solo las ciudades de Madrid y Barcelona superaron los umbrales determinados por este organismo. Ahora, bajo los nuevos criterios serían más los núcleos urbanos que no cumplirían con las directrices.
Respecto a las partículas finas, la legislación española es menos estricta que la europea calculándose que 23 millones de habitantes viven en lugares que superan los umbrales de PM10. De acuerdo con los nuevos límites de la OMS sería un 89% de la población, unos 39 millones de personas, los que estarían expuestos.