5 Consejos a tener en cuenta antes de poner en alquiler un inmueble
La adquisición y sostenimiento de los inmuebles es una de las formas de resguardo de patrimonio más valoradas en el país. Sin embargo, es un hecho que, ya sea que heredamos o compramos el bien, mantenerlo implica una serie de gastos.
Para sortear esos gastos y, en muchos casos para percibir algunas ganancias, muchos propietarios deciden poner en alquiler sus propiedades. Otros, en cambio, se detienen a pensar en las complicaciones que puede acarrear asumir este tipo de relaciones comerciales.
Por fortuna, podemos asegurar una experiencia positiva. Solo debemos seguir algunos consejos antes de poner en arriendo nuestras propiedades.
1. Redactar un contrato claro
Para lograr una buena relación comercial con los inquilinos, debemos comenzar redactando un contrato claro. Allí debemos asentar, en principio, las condiciones para alquilar, como la presentación de garantías o seguro hogar para garantizar el cumplimiento del pago.
En el contrato, también debemos establecer las cláusulas para una buena convivencia con los vecinos y cuidado del inmueble. Es la oportunidad que los propietarios tienen para establecer normas preexistentes, como la prohibición de realizar reformas.
2. Elegir a los inquilinos adecuados
Otra forma de garantizar una relación positiva con los arrendatarios es elegirlos de antemano, ya sea personalmente o mediante un gestor. Esto puede realizarse tanto de forma personal como mediando con un agente inmobiliario.
¿Cómo lograrlo? Podemos, por ejemplo, solicitar documentos para conocer su solvencia económica, solicitar referencias de otros propietarios, consultar por las actividades de la familia, etcétera.
3. Acondicionar previamente el inmueble
Una de las cláusulas que todo contrato de alquiler contiene se relaciona con el cuidado del inmueble, ya que es uno de los mayores inconvenientes en el proceso de alquiler. Sin embargo, la mejor forma de lograr esto es entregar el espacio totalmente acondicionado.
Es fundamental hacer una meticulosa revisión para resolver todos aquellos desperfectos superficiales y no tanto. Así, nos ahorramos tener que lidiar con una situación que pueda desencadenar daños de mayor tenor.
4. Definir el formato de alquiler
Dependiendo de nuestras experiencias, necesidades y condiciones, podemos optar entre varias alternativas al poner un inmueble en alquiler. La primera decisión tiene que ver con si se trata de un arriendo temporal o permanente.
Otra definición tiene que ver con la relación con los inquilinos. En ese sentido, podemos decidir si nos haremos cargo del contrato o, más bien, preferimos contratar a un agente que se encargue.
5. No olvidar los trabajos de mantenimiento
Ya sea que optemos por alquilar nuestro inmueble de forma temporal o permanente, debemos tener en cuenta que es necesario mantener el inmueble. La Ley de Alquileres dispone, además, que según la urgencia, tenemos de 1 a 10 días para solucionar un desperfecto.
Si bien podemos establecer con los inquilinos que estos se hagan cargo del arreglo aunque lo paguemos nosotros, es importante cerciorarnos de que se haga correctamente. Para eso, podemos agendar una visita o coordinar la supervisión o gestión de las intervenciones.