Armenia ya recibió a refugiados que huyeron de Nagorno Karabaj
Cientos de refugiados que huían de Nagorno Karabaj -principalmente mujeres, niños y ancianos- entraron este domingo en Armenia, tras la ofensiva relámpago de Azerbaiyán contra los separatistas de este territorio mayoritariamente poblado de armenios.
El gobierno armenio reportó que este domingo por la noche 377 “personas obligadas a irse” habían ingresado al país. Según el último recuento del Ministerio ruso de Defensa, 311 civiles, de los cuales 102 eran menores, fueron escoltados por las fuerzas rusas de paz hasta Armenia.
“El contingente ruso de mantenimiento de la paz asegura que sigue alojando a 715 civiles, incluidos 402 niños” a la espera de una solución, explicó el ministerio.
Las autoridades de Nagorno Karabaj, también conocida como República de Artsaj, indicaron que ya se ha procesado a 216 de estos desplazados y se han listado sus necesidades, mientras que queda por identificar a otros 161. De los 216 identificados, 118 han preferido alojarse en domicilios particulares, mientras que 98 estarán en instalaciones habilitadas por las autoridades armenias
Los primeros 40 desplazados llegaron a Armenia el sábado a través del corredor de Lachin, atravesando el puente de Hakari, un traslado que han permitido las fuerzas azeríes que controlan la zona. El paso se realizó sin registro ni control alguno. Posteriormente se ha registrado a los desplazados en el centro humanitario levantado en Kornidzor.
Las autoridades separatistas habían anunciado poco antes que los civiles que quedaron sin hogar debido a los últimos actos de violencia serían trasladados a Armenia con la ayuda de los soldados de mantenimiento de la paz rusos, presentes desde la última guerra en 2020.
“Nuestras familias estaban en los refugios. Estábamos en el ejército, pero ayer tuvimos que dejar los fusiles. Así que nos fuimos”, dijo este hombre de unos treinta años que esperaba junto con otros a ser registrados en el centro de acogida.
Otros esperaban noticias de sus allegados. “Mi hijo estaba en el ejército. Está vivo pero me preocupa”, declaró un hombre.
Rodeada por las tropas de Azerbaiyán, Stepanakert, capital de Nagorno Karabaj, no tiene desde hace varios días electricidad ni combustible, y la población carece de comida y medicinas, según pudo confirmar un corresponsal de AFP.
En medio de la creciente tensión y de la huida de cientos de personas, un primer convoy de ayuda de la Cruz Roja logró entrar al enclave este domingo.
El ministro armenio de Relaciones Exteriores pidió el sábado ante las Naciones Unidas el envío “inmediato” de una “misión” de la ONU a Nagorno Karabaj y reiteró acusaciones de “limpieza étnica” en la región separatista.
Por su parte, el gobierno armenio reprochó implícitamente a Rusia su falta de apoyo tras la victoria de las tropas azerbaiyanas que reivindicaron el control de este territorio del Cáucaso.
“El sistema de seguridad exterior en el que está implicado Armenia resultó ineficaz para proteger su seguridad e intereses”, declaró el primer ministro armenio, Nikol Pashinian, en un discurso transmitido por televisión.
Pashinian se refería a las largas relaciones que tiene su país con Moscú, heredadas de la época en el que formaba parte, como el vecino Azerbaiyán, de la URSS.
Armenia sigue siendo miembro de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC), una alianza militar encabezada por Rusia.
En Ereván, la capital armenia, la oposición se manifestó el domingo por la noche por sexto día consecutivo y acusó al primer ministro de “destruir deliberadamente las relaciones de Armenia con sus socios”.
Como muestra del impacto internacional de esta crisis, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, aliado de Bakú, se reunirá hoy lunes con su homólogo de Azerbaiyán, Ilham Aliyev.
Pese a la reciente operación militar, las autoridades armenias confirmaron un encuentro previsto entre el primer ministro armenio y el presidente azerbaiyano en España el próximo mes.
Nagorno Karabaj ya fue golpeada por dos guerras entre las antiguas repúblicas soviéticas del Cáucaso, Azerbaiyán y Armenia: una de 1988 a 1994 (30.000 muertos) y otra en el otoño boreal de 2020 (6.500 muertos).
La reciente incursión militar de Bakú, que duró unas 24 horas, causó al menos 200 muertos y 400 heridos, según los secesionistas armenios. Con información de AFP y Europa Press.