Fiestas de fin de año: cómo cuidar a las mascotas del ruido de la pirotecnia
A pesar de estar prohibida y de los controles, el uso de pirotecnia causa estragos entre los animales domésticos. Se brindó una serie de recomendaciones relacionadas con la pirotecnia y su afectación sobre las mascotas.
Así como las autoridades sanitarias dieron una serie de recomendaciones para prevenir los contagios de coronavirus en las próximas fiestas de Navidad y Año Nuevo, se ofreció una serie de consejos para cuidar a las mascotas, aun cuando en la ciudad el uso de pirotecnia está prohibido.
Sin embargo, como ya quedó demostrado en cada celebración de Navidad y Año Nuevo los fuegos artificiales, siempre se hacen presentes más allá de las intensas y sostenidas campañas que se hacen para perseguir y aplicar multas a quienes propicien su uso.
Ante esa posibilidad, se brindó una serie de recomendaciones relacionadas con la pirotecnia y su afectación sobre las mascotas.
Principales recomendaciones
-Evitar el uso de elementos pirotécnicos: aplicable en caso de poseer un animal proclive a padecer ataques nerviosos a causa de los ruidos provocados por la detonación de explosivos.
-No dejar solos a los animales: sobre todo en noches donde la pirotecnia es utilizada durante varias horas.
-Suministrarles sedantes: si el animal se va a quedar en soledad, recurrir a un veterinario que le suministre un sedante en gotas, que será administrado bajo estrictas precisiones del profesional durante la mañana y una 2ª dosis 1 hora antes de abandonar la casa, para poder advertir cómo opera la droga en la mascota.
-Tapar con algodón sus los oídos: con la ayuda de una gota de vaselina para que no se lastimen.
-Dejar prendidos el televisor o la radio: los sonidos aplacarán los ruidos del exterior y la fuerza de las vibraciones. Así, se ayudará al animal a permanecer más tranquilo.
-Dejarlos en lugares pequeños libres de elementos: hay que tener en cuenta que al escuchar los ruidos los animales puede comenzar a moverse con rapidez y lastimarse.
-Si el dueño va a permanecer en casa: se aconseja observar al perro o al gato cuando comienzan los mayores ruidos y si se advierte que el animal se pone nervioso, llevarlo a un lugar más alejado, donde pueda sentirse seguro. Si la mascota elige esconderse, hay que respetar su conducta.
-No dejarlos cerca de balcones: Es importante que los animales no tengan acceso a estos lugares ya que en un estado de alteración pueden arrojarse al vacío.