Hallaron a 6.500 metros de profundidad los restos de un buque de EEUU hundido en Filipinas
El USS Johnston se hundió el 25 de octubre de 1944, durante la batalla del golfo de Leyte, una de las mayores batallas navales en la historia y que marcó el inicio del fin para Japón.
Una expedición descubrió a 6.500 metros de profundidad en las costas de Filipinas los restos de un buque de la Marina estadounidense hundido durante la Segunda Guerra Mundial, informó el domingo un miembro del equipo.
�SAcabamos de efectuar la inmersión a más profundidad de la historia para encontrar los restos de destructor USS Johnston⬝, tuiteó Victor Vescovo, fundador de la empresa estadounidense Caladan Oceanic, que dirigió el submarino que localizó al barco.
Durante dos inmersiones de ocho horas realizadas a finales de marzo, el equipo pudo filmar, fotografiar y estudiar los restos del buque, frente a las costas de las islas de Samar, indicó Caladan Oceanic, una firma especializada en tecnologías submarinas.
El destructor de 115 metros de eslora se hundió el 25 de octubre de 1944, durante la batalla del golfo de Leyte, una de las mayores batallas navales en la historia y que marcó el inicio del fin para Japón.
Otros exploradores lo localizaron en el mar de Filipinas en 2019, pero la mayor parte del barco no estaba al alcance de ningún dispositivo teledirigido.
�SLocalizamos los 2/3 de la parte delantera del navío, de pie e intacta, a una profundidad de 6.456 m. Tres de nosotros, en dos inmersiones, examinaron el navío y rindieron homenaje a su valiente tripulación⬝, precisó Vescovo.
Sólo 141 de los 327 tripulantes del buque sobrevivieron, según los archivos de la Marina estadounidense.
La expedición encontró intactos la proa, el puente y la sección central. El número del casco �S557⬝ seguía estando bien visible.
Parks Stephenson, navegador y historiador de la expedición, señaló que en los restos del barco se podían observar los daños que sufrió durante esa intensa batalla, hacé más de 75 años.
�SRecibió disparos del mayor buque de guerra jamás construido, el acorazado Yamato, de la Marina imperial japonesa, y contraatacó violentamente⬝, declaró Stephenson.