Homenaje a la actuación de la Prefectura Naval Argentina en la guerra de Malvinas
En la mañana de ayer se llevó a cabo en la Plaza de Armas de la Prefectura Naval Argentina, el homenaje a la actuación de dicha institución en la guerra de Malvinas y la conmemoración del Combate Aeronaval de Guardacostas GC-83 �SRío Iguazú⬝. Del mismo, participaron instituciones educativas, funcionarios, ex funcionarios de las fuerzas, ex combatientes y demás autoridades.
Palabras del prefecto Walter Adrian Tagliapietra, Jefe Prefectura Concordia:
�SHan pasado 40 años de la guerra de Malvinas, y hoy, conmemoramos un nuevo aniversario de la participación de la Prefectura Naval Argentina en la gesta, y la épica actuación del Guardacostas 83 río Iguazú en aquel inusual y desigual combate aeronaval del 22 de mayo, el cual se ha escrito con letras de oro en las páginas de la historia argentina.
El 11 de abril de 1982 zarparon de puerto deseado los guardacostas 82 �Sislas Malvinas⬝ y 83 �SRío Iguazú⬝. La misión, ejercer en las islas su rol de policía de seguridad de la navegación y de los puertos, la salvaguarda de vidas y bienes transportados por buques y sus demás funciones como autoridad marítima argentina.
Ambos guardacostas iniciarían una navegación en una singladura en la que, además de tener que sortear las difíciles condiciones que imponía la naturaleza para el porte y características propias de éstas unidades, se sumaba la dificultad de tener que quebrar el bloqueo naval impuesto por la fuerza por parte del gobierno británico. Sin embargo, los guardacostas pese a sus 28 metros de eslora lograron arribar a puerto argentino dos días después, burlando de esta manera el bloqueo naval impuesto y el asecho de submarinos nucleares, entre otras naves enemigas.
Ya en las islas, estas naves fueron afectadas a tareas de patrullaje policial, practicaje de buques mercantes a través de zonas minadas, apoyo sanitario, búsqueda y rescate en apoyo a misiones aéreas, apoyo logístico y transporte de personal de las fuerzas armadas, contribuyendo de esta forma con las operaciones de despliegue de material y tropa.
El 22 de mayo se le asignó al guardacostas �SRío Iguazú⬝ la misión de navegar a pradera del ganso, cercano a Darwin, transportando a 20 soldados de artillería del ejército argentino con 2 cañones Obuses Otto melara de 105 milímetros. a 40 minutos de arribar a destino, el clima un tanto distendido, fue quebrado cuando con las primeras luces del día un alerta rojo transmitido por radio anticipaba la presencia de fuerzas hostiles en el cielo de Malvinas, la sirena anunció zafarrancho de combate, movilizando a la tripulación, quienes presurosos ocuparon sus respectivos puestos.
Se trataban de dos aviones de combate sea Harrier, en decidida actitud de ataque y en vuelo rasante. Dispararon sus cañones de 30 mm sobre el guardacostas río Iguazú, provocando averías de gran consideración en el timón, sistema eléctrico y sala de máquinas.
Percatado de ello el capitán, subprefecto Eduardo Adolfo Olmedo, ordenó poner rumbo inmediato hacia un islote cercano y aguas menos profundas, fue en esa circunstancia cuando el cabo segundo Raúl Ibáñez, encargado de la sala de máquinas, solicitó autorización para subir a cubierta.
Allí, la situación era de extrema gravedad y dramatismo, junto al emplazamiento de la ametralladora yacía sin vida el cabo segundo Julio Omar Benítez, y con graves heridas el oficial principal Gabino Oscar Gonzalez, el ayudante de tercera Juan José Baccaro y el cabo segundo Carlos Bengoechea.
Sin tiempo para reponerse ante tal escena y el advenimiento de la segunda ola de ataque de los aviones, el cabo Segundo Ibañez tomó la posta de su camarada herido de muerte y comenzó a disparar con la ametralladora Browning calibre 12,7, la cual se encontraba colimada en la silueta de una de las aeronaves enemigas, logrando derribarla mientras que el segundo avión emprendió la retirada del escenario de combate, perdiéndose en el horizonte.
La tripulación del guardacostas 83 Río Iguazú logró repeler el ataque enemigo, derribando una aeronave de guerra de avanzada tecnología con un medio de superficie concebido para realizar tareas policiales relacionadas con la seguridad, y con armamento y equipamiento para cubrir misiones de esta naturaleza. Un épico e inusual combate aeronaval que puso a prueba el temple de estos hombres, en el cual hicieron gala de su coraje, revelando el valor, el profesionalismo y la generosidad de los mismos. Ello a pesar de haber sufrido la baja en combate del cabo segundo Julio Omar Benítez.
Por esta acción, la bandera del guardacostas Río Iguazú ha sido condecorada con la medalla �Shonor al valor en combate⬝.
En cuanto al personal:
El accionar del cabo segundo Julio Omar Benítez ha sido distinguido con la medalla �Sla nación argentina al muerto en combate⬝.
El cabo segundo José Raúl Ibañez fue condecorado con la máxima distinción existente hasta ese momento, la cruz �Sla nación argentina al heroico valor en combate⬝.
El oficial principal Gabino Oscar Gonzalez, el ayudante de tercera Juan José Baccaro y el cabo segundo Carlos Bengoechea, han recibido la condecoración de �Sla nación argentina al herido en combate⬝.
El 22 de mayo es una fecha que nos convoca, como prefecturianos, a rendir homenaje y reconocimiento eterno a estos grandes hombres, y a aquellos que han hecho entrega de su sacrificio en pos de la patria, familiares, amigos y camaradas.
También homenajeamos y reconocemos al marinero Jorge Eduardo López, quien fuera asignado a la dotación de la prefectura islas Malvinas y perdiera la vida al ser hundido el buque �Sisla de los estados⬝ que lo transportaba, confiriéndose también por ese hecho la medalla �Sla nación argentina al muerto en combate⬝.
El marinero López y el cabo Segundo Benítez, junto a muchos argentinos, descansan en nuestras queridas y eternas Islas Malvinas.
Honor y gloria eterna para nuestros veteranos de guerra.
Para concluir, pido a Dios nuestro señor, para que vele por el eterno descanso de todas las almas de quienes han ofrendado su vida en defensa de la patria, familiares, amigos y camaradas, y a la Virgen Stella Maris, nuestra patrona, para que los cobije y los cubra con su manto, y brille para ellos la luz que no tiene fin⬝.