La pirotecnia navideña en Concordia: Transgresión a la Ordenanza 35.936
La noche del 24 de diciembre, Concordia se iluminó con el resplandor y el estruendo de la pirotecnia, una práctica que, a pesar de la prohibición, se desbordó en barrios y el centro de la ciudad. A las doce de la noche, los cielos se llenaron de cohetes, bombas, cañitas voladoras, juegos de luces y explosiones de todo tipo, desafiando la Ordenanza Nº 35.936, que prohíbe la venta, tenencia, uso y transporte de elementos pirotécnicos en todo el territorio local.
Aunque la municipalidad había realizado campañas de concientización sobre la normativa, muchos habitantes no se amedrentaron y desobedecieron la ley. Se habrían reportado tablones en diversas esquinas de la ciudad, donde se vendían pirotécnicos de manera informal, además de que trascendió en las redes sociales que muchos optaron por comprar pirotecnia a través de aplicaciones de mensajería, incurriendo en una doble falta: la venta de artículos prohibidos y el transporte de explosivos en vehículos no habilitados para ello. La violación a la ordenanza afectó principalmente a quienes no participan de esta tradición ruidosa, causando molestias a personas, animales y familias que prefieren disfrutar de las festividades sin el sobresalto de las explosiones. La venta y uso masivo de pirotecnia perduró durante la madrugada, sin que las campañas de advertencia o las acciones de control por parte de las autoridades hayan logrado frenar la desobediencia de la norma.
La Ordenanza Nº 35.936 fue sancionada el 10 de noviembre de 2016 y promulgada el 17 del mismo mes, estableciendo una serie de restricciones que buscan prevenir los peligros de la pirotecnia, tanto para la salud como para el bienestar de la comunidad. La norma prohíbe en todo el territorio de Concordia la venta, el uso, el transporte y el almacenamiento de estos productos. Además, estipula severas sanciones para quienes infringen la ley, con multas que van desde 10 hasta 200 "juristas" (unidad de medida local) y, en caso de ser comercios, pueden enfrentar una multa mínima de 50 "juristas", así como la clausura del local y el decomiso de la mercancía.
Expectativas para el Año Nuevo
A pesar de las advertencias y el esfuerzo municipal por hacer cumplir la ordenanza, la pirotecnia sigue siendo una práctica recurrente durante las festividades. A pocos días de que se celebre el Año Nuevo, se espera que la actividad pirotécnica sea aún mayor, lo que plantea nuevos desafíos para el control y el cumplimiento de la ley.
Por el momento, se desconocen los detalles de las denuncias y operativos realizados, ya que debido al asueto administrativo no se ha informado sobre los resultados de los mismos. Se espera que, en el futuro, se refuercen las acciones para que la pirotecnia no siga siendo una transgresión a la ley en las celebraciones de fin de año.
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