La República de Entre Ríos, la Hidrovía y el potencial de Ibicuy
El fiscal de Estado, Julio Rodríguez Signes, explora en las múltiples ventajas de la provincia dentro de la Región Hidrovía, que la convierte en un actor central de un importante motor económico.
Francisco Ramírez denominó �SRepública de Entre Ríos⬝ al territorio mesopotámico; Rocamora lo llamó �SContinente de Entre Ríos⬝. Ambas nominaciones armonizaban con las características y el potencial de la región. Más adelante abandonamos aquellas pretensiones, pero quizá es hora de retomarlas, aunque con un encuadre institucional y jurídico más moderno e integrado al país.
El artículo 124 de la Constitución Nacional postula que las Provincias podrán crear regiones para el desarrollo económico y social y establecer órganos con facultades para el cumplimiento de sus fines⬝. Podemos entonces retomar la idea de un ambicioso progreso en bloque bajo el formato de Región de la Hidrovía, junto a Misiones, Santa Fe, Corrientes, Formosa, Chaco y Buenos Aires. De hecho, el presidente nos ha dado el espaldarazo inicial al anunciar la provincialización de la vía fluvial más importante del país y quizá del continente, en lo que a navegación refiere.
Como parte de la Región Hidrovía, Entre Ríos tiene ventajas comparativas significativas: dos ríos navegables, el Paraná y el Uruguay; tres puertos, Ibicuy, Uruguay y Diamante, capaces de recibir buques de ultramar, otros tres que pueden ser barcaceros, Hernandarias, La Paz y Puerto Ruiz. Además tenemos lo que Santa Fe no tiene y nos pide prestados: espacios para amarrar barcazas. Dejemos en claro que Ibicuy no es un puerto desarrollado, todavía. Pero es una zona portuaria con un potencial enorme. Tiene 108 hectáreas propiedad de la Provincia de Entre Ríos (el puerto de Buenos Aires tiene 98), un espejo de agua muy ancho, que permite maniobrar a un Panamax sin problemas. Un camino de acceso de 42 kilómetros que lo vincula con Ceibas y posibilidades de unión con la entrada a Villa Paranacito y por Médanos con las rutas 12 y 6 que viene desde La Paz y conecta con la 127, o sea, una ruta directa desde el Sur de Brasil. Una opción de compra de otra superficie similar.
La posibilidad de ampliar a Ibicuy la Zona Franca de Concepción del Uruguay. Un muelle continental flamante, que ya ha dado pruebas que funciona con cargas de madera y arroz. Un muelle isla a la espera de inversión para terminarlo y operar fácilmente el trasbordo de minerales, granos o combustibles. La obra eléctrica cuya licitación es inminente. Están echadas las bases para el desarrollo de la zona portuaria que nada tendría que envidiar a las terminales bonaerenses o santafecinas. Es una zona portuaria para operar con cereales, maderas, combustibles, minerales, contenedores e incluso automotores y maquinaria. Hay espacio para todos.
Sería una terminal inexorablemente pública � privada, en cooperación, que receptaría las cargas de toda la Mesopotamia, el norte argentino, Brasil, Bolivia y Paraguay. Incluso su desarrollo sería una invitación a recuperar en serio la Línea Urquiza de ferrocarril de cargas y sería el paso inicial para la instalación en la zona portuaria de industrias que procesen nuestra propia materia prima. Se conectaría con los puertos de Diamante, La Paz, Uruguay, Puerto Ruiz y Hernandarias y también con los puertos río arriba de Rosario, ubicados en Chaco, Corrientes, Formosa y Paraguay. Además, Ibicuy está justamente frente a la isla más grande de Argentina: Las Lechiguanas, constituida por 250.000 hectáreas de la tierra mejor regada y más fértil del mundo, aunque es cierto, inundable en ciertas condiciones.
La Administración de Gustavo Bordet ha trabajado mucho sobre este tema, por el impulso que el propio Gobernador le da a la cuestión, procurando un salto de desarrollo cualitativo, con el sello y la marca de Entre Ríos. Se encuentra lista una convocatoria a un concurso de proyectos integrales, para que en competencia abierta, transparente y democrática, el sector privado se sume y formule sus propuestas de inversión. El desarrollo de Ibicuy se conecta directamente con la idea de participar a través de una Región, de la administración de la Hidrovía. Si lo logramos, Entre Ríos será protagonista.