Javier Milei será el primer presidente que visitará a Donald Trump tras su triunfo ante Kamala Harris, el encuentro tendrá lugar en Mar-a-Lago, el exclusivo club privado del futuro presidente estadounidense.
Después de su participación en la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC) en Miami, Javier Milei se reunirá oficialmente con Donald Trump en la legendaria mansión Mar-a-Lago, ubicada en Palm Beach, Florida. Esta imponente propiedad, que ha pasado por las manos de su creadora, el Gobierno de los Estados Unidos y, finalmente, Donald Trump, es un emblema de lujo y tradición arquitectónica.
Construida entre 1923 y 1927, Mar-a-Lago fue concebida por Marjorie Merriweather Post, una de las mujeres más ricas de su tiempo, como un puente entre el océano Atlántico y el lago Worth. La propiedad combina una estructura de hormigón reforzado con acero, construida para soportar huracanes, y cuenta con un diseño arquitectónico que destaca detalles de alta artesanía y materiales selectos de distintas partes del mundo.
El edificio principal, en forma de medialuna, ofrece una serie de claustros con vistas al lago y cuenta con una torre de 23 metros, que permite disfrutar de una panorámica única de los alrededores. En el extenso terreno, los visitantes pueden recorrer un camino de piedra Chattahoochee que lleva a un túnel bajo South Ocean Boulevard, conectando la mansión con su exclusivo Beach Club.
La construcción de Mar-a-Lago refleja una búsqueda por la perfección en cada detalle. 
Los herrajes se fundieron localmente en West Palm Beach y la madera de ciprés, que aún adorna puertas y vigas, fue adquirida en la zona. Excepcionalmente, la finca también incluye 20.000 tejas cubanas para el techo y casi 700 metros cuadrados de mármol blanco y negro extraído de un antiguo castillo en Cuba, que embellecen el comedor. Los azulejos decorativos fueron seleccionados por Post de colecciones internacionales, convirtiéndose en un elemento artístico irrepetible hoy en día.