Repercusiones del caso Urribarri. Leonardo Portela: “El fallo fue controversial, incluso en mi entorno”
El presidente del Superior Tribunal de Justicia (STJ) de Entre Ríos, Leonardo Portela, explicó los fundamentos detrás del fallo que revocó la prisión preventiva del exgobernador Sergio Urribarri y su cuñado Juan Pablo Aguilera.
Ambos habían sido condenados por corrupción y estuvieron cinco días en prisión preventiva tras considerarse riesgo de fuga. La decisión judicial generó amplio debate público.
Contexto del fallo y repercusiones
Portela, junto con el juez Germán Carlomagno, votó a favor de la impugnación extraordinaria presentada por los acusados, lo que les permitió recuperar la libertad mientras su caso sigue en la Corte Suprema. Según el magistrado, “el principio de inocencia se mantiene hasta que haya una condena firme”, lo que justificó la medida de liberar a Urribarri y Aguilera. Sin embargo, el juez Miguel Giorgio, en disidencia, cuestionó el tratamiento prioritario del caso durante la feria judicial y señaló que había 24 casos similares pendientes.
Respuesta a las críticas
Portela explicó que cualquier pedido durante la feria se habilita para evaluación, independientemente de la persona involucrada. Respecto a la acusación de trato privilegiado, afirmó que la prisión preventiva es una medida cautelar que debe ser tratada con celeridad.
“Esperar 30 días de feria para resolver sobre una medida de coerción no corresponde”, subrayó.
Impacto en la imagen del Poder Judicial
El presidente del STJ reconoció que la justicia enfrenta un problema de credibilidad pública, agravado por la falta de recursos y una sobrecarga de trabajo.
“El Poder Judicial tiene una de las peores imágenes institucionales del país, y eso es algo que debemos intentar revertir todos los días”, admitió.
El sistema judicial bajo presión
Portela destacó que el cúmulo de trabajo y la falta de infraestructura afectan la capacidad de respuesta del sistema judicial.
“Nos hemos adherido a leyes que reconocen derechos espectaculares, pero no tenemos los recursos para sostenerlos”, señaló, poniendo como ejemplo los juicios por jurado, que enfrentan altos costos y desafíos logísticos.
El impacto emocional de las decisiones
Portela también habló del impacto personal de firmar fallos con repercusión pública.
Comentó que incluso tuvo que explicar la decisión a sus hijos adolescentes, quienes no estuvieron de acuerdo con su voto. “Ellos entendieron mis fundamentos, pero no los compartieron. Les digo que el día que sean jueces podrán decidir como quieran”, concluyó.
Conclusión
El fallo que liberó a Urribarri y Aguilera evidencia tanto las tensiones internas del Poder Judicial como los desafíos de operar en un sistema sobrecargado y bajo escrutinio público.
Para Portela, más allá de las críticas, la prioridad sigue siendo garantizar el respeto al debido proceso y al principio de inocencia. (De una nota en Radio Plaza)
Comentarios
Para comentar, debés estar registrado
Por favor, iniciá sesión