12 de octubre ¿qué celebramos?
Esta pregunta me la hice muchas veces, sin encontrar una respuesta seria. Me dejaba llevar por aquello fantasioso que nos enseñaron desde niños, en nuestras escuelas. Hoy sé que es un cuento transformado en “historia real”.
Pero seguí haciéndome la misma pregunta y la respuesta más VERDADERA, me la dio en un reportaje que leí, un aborigen, Santos Piutrillán, Longko de la Comunidad Aborigen MAPUCHE – TEHUELCHE; que dijo:
“Nosotros como pueblos originarios no tenemos nada que celebrar”. “Nosotros celebramos el 11 de octubre, el último Día de Libertad, el día antes de la llegada de Colón”.
Es cierto, porque el 12 comenzó el genocidio de nuestros aborígenes, por parte de quienes traían la Biblia en una mano y la espada en la otra, cosa que no se puede entender.
Así fueron y siguen siendo los imperialistas prepotentes y ambiciosos que dominaron y siguen dominando el mundo.
Le robaron hasta la primavera, en “la subasta” se robaron todo, como dice la canción de Teresa Parodi, pero no pudieron robarle su libertad, su espíritu de lucha, sus canciones, su sabiduría, especialmente sobre la naturaleza, su dignidad. Y en esto nos dan cátedra, especialmente a los que están en el poder, que han olvidado que esta palabra está escrita en nuestra historia y nuestra conciencia por los hombres y mujeres aborígenes y por nuestros héroes, que lucharon hasta morir por nuestra Latinoamérica.
Siempre las potencias extranjeras que vienen por nuestras riquezas, lo que sucede hasta estos días, tratan de muchos modos robarnos nuestra identidad, nuestro modo de pensar, nuestro amor por la patria, por nuestra bandera. Lo peor del caso que tienen la ayuda de “argentinos” empresarios, legisladores, políticos aún en el más alto nivel, que deciden, trabajan o votan en contra de los intereses de nuestra Patria, y de nuestro pueblo, cada vez más empobrecido. Los demás, como nuestros padres aborígenes, mantengamos viva nuestra identidad, y aunque parezca que todo está perdido, sigamos luchando por nuestra soberanía, nuestros derechos y nuestra dignidad.
Quizás tengamos que pensar como Don Santos Piutrillan, nosotros no tenemos nada que celebrar este día, sino el día anterior en que llegó a nuestra Argentina, el poder, la crueldad y el deseo de quedarse con nuestras riquezas, la imperialista EE. UU, Inglaterra, y el FMI, su herramienta más eficaz para saquearnos, empobrecernos hasta hambrearnos si fuera necesario, como lo están haciendo con nuestra Patria Argentina y nuestra Patria Grande Latinoamérica.
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