Recomendaciones de bromatología para la adquisición y consumo de pescados
La Dirección de Bromatología, en su función de preservar la salud de los consumidores en vísperas de la celebración de Semana Santa, brinda una serie de consejos a la hora de adquirir productos ictícolas.
¿Qué observar a la hora de adquirir pescados frescos?
Olor característico, (si tiene olor a amoníaco es señal de deterioro).
Ojos sobresalientes y brillosos, (ojos hundidos, opacos son señales de deterioro).
Las agallas deben ser rojas, (grises u oscuras son señales de deterioro).
La carne debe ser firme y de superficie lisa, (si es rugosa o cede al presionarla con el dedo, es señal de deterioro).
La piel debe tener colores vivos y brillantes, (la pérdida de brillo metálico y la presencia de una capa viscosa sobre la piel son señales de deterioro).
Las escamas deben estar adheridas al cuerpo (el desprendimiento de las mismas es señal de deterioro).
Para tener en cuenta
Una vez adquiridos, refrigerarlos rápidamente al llegar al hogar, para no cortar la cadena de frío de los mismos.
A la hora de descongelarlos, hacerlo en el interior de la heladera y nunca a temperatura ambiente.
Proceder a la cocción completa (la temperatura debe ser de al menos 71 °c. durante 2 minutos).
¿Qué observar a la hora de adquirir productos ictícolas en lata?
Las latas deben estar en perfecto estado (no deben estar: abolladas, oxidadas, ni hinchadas).
Deben estar correctamente rotuladas.
Siempre verificar la fecha de vencimiento.
Ante cualquier duda, como así también ante la constatación de anomalías en los alimentos o en los comercios, comunicarse al teléfono 345-4291516, o dirigirse personalmente a la Dirección de Bromatología, ubicada en calle Roque Sáenz Peña N° 225, 2do. Piso.