En este espacio, hace un tiempo, comentamos sobre distintos aspectos de las celebraciones públicas de fechas conmemorativas en nuestra ciudad.
En una nota periodística publicada en el diario “La Calle” del 27 de septiembre de 1970, se detallan algunas actividades que se llevaron a cabo con motivo del centenario de la Revolución de Mayo. Comenta el periodista que: “durante la víspera se realizó una procesión patriótica, a las 9 de la noche (…). El pueblo se concentró frente al edificio municipal, en calle Urquiza, y luego de organizada la columna –encabezada por autoridades locales- recorrió esta arteria hasta la calle 3 de Febrero y circundando la entonces llamada Plaza Nueva, regresó por Entre Ríos hasta Bartolomé Mitre, retornando al punto de partida. En ese lugar se dispersó”.
El cronista destaca, en varios pasajes del texto, algunas particularidades del evento. Por un lado, menciona el entusiasmo que tenían los integrantes de la columna patriótica; y por otro, que dicha procesión estaba integrada únicamente por varones, es decir, no participaban mujeres ni siquiera como representantes de establecimientos escolares, pues no era común la asistencia femenina en este tipo de manifestaciones en aquel entonces.
También, el periodista relata lo que aconteció el día 25 de mayo: “Al día siguiente (…), se inauguró oficialmente, por la mañana, la estatua del prócer máximo de la argentinidad. Asistieron una media docena de escuelas, con maestros y alumnos y la población en pleno. El pie del monumento quedó cubierto de flores por cuanto los alumnos, al desfilar arrojaban pequeños ramitos. Este monumento vino a ocupar el lugar de la llamada columna, demolida en 1906 por disposición del intendente de entonces, don Juan Salduna”.
Dentro de los festejos se previó la proyección de una película, dato muy sorprendente ya que, el reportero relata cómo y dónde se monto ese “cine al aire libre”: “por calle Urquiza, frente al templo, entre dos parantes al borde de la acera se instaló el telón; y la máquina proyectora se ubicó en una de las ventanas de la casa parroquial. La asistencia de espectadores cubría una mitad de la cuadra y las aceras de la plaza. Para apagar las luces había poco trabajo pues era suficiente con suprimir el foco de la calle Mitre y 1° de Mayo”. Agrega, el narrador, que la película era de cine mudo y que se exhibió un film, que fue muy bien recibido por el público, del cómico español Toribio Sánchez, muy reconocido en ese tiempo.
Los festejos del centenario terminaron en Concordia con la distribución de una medalla de plata; la fotografía que ilustra estas líneas es una de esas piezas conmemorativas que pertenecen a las colecciones de nuestro Museo.
Cabe mencionar que esas medallas fueron mandadas a acuñar por la Municipalidad de Concordia y tenía grabada la leyenda “El pueblo de Concordia. A la Revolución de Mayo. Cien años de vida. 1810 – 25 de mayo de – 1910. Hacia la libertad”
¿Conocían esta información del pasado de la ciudad?
Nos volvemos a encontrar en una semana para descubrir más historias de Concordia y la región.
Museo Regional Municipal Palacio Arruabarrena, dirección: Entre Ríos y Ramírez.
AUTOR
Directora del Museo Regional Palacio Arruabarrena
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